miércoles, 5 de mayo de 2010

CIUDAD: "pequeñas delicias de la vida cotidiana"

Dejando los pies en la marcha madrileña

Cuando se viene a Madrid hay que tener una cosa clara. Cuando se sale, se está casi toda la noche de pie, en lugares mas o menos pequeños y siempre, siempre, llenos de gente. Teniendo eso claro, es más fácil enfrentarse a la marcha madrileña, que es de las mejores de Europa. La noche suele partir con copas y tapas. La gente se reúne en bares que te dan un pequeño platito con algo para picar cuando pides algo para tomar. Aceitunas, papas (patatas) fritas, queso, pepinillo o lo que sea el cariño o creatividad del local. Luego se pasa un par de horas cambiando de bar, y según el ánimo de las personas, uno puede estar hasta en 5 lugares en una noche (todos de pie, ojo). Si los comensales están de ánimo para seguir al siguiente nivel, se va bares con música donde se arma un poco la fiesta, la gente conversa y baila. Para los más prendidos, se puede rematar en una discoteque para bailar hasta altas horas de la madrugada.

Con esto les dejo las siguientes recomendaciones. Zapato cómodo, gotitas para los ojos (lugares chicos con mucho humo son la tónica) y alto sentido del humor par aguantar comer de pie, ser pisado y mojado con alcohol (dado la peques de los lugares), Pero todo tiene su recompensa, porque nunca he escuchado a alguien al final de la noche quejarse por nada, salvo porque se ha pasado muy rápido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario